Al menos 800
familias están sin servicio eléctrico desde la tarde de este lunes,
incluyendo ancianos, niños y personas con cáncer, luego de un estallido y
posterior incendio en la subestación eléctrica Miranda, ubicada en la
Circunvalación 1 de Maracaibo, estado Zulia.
Indignados y
desesperados por esta crisis eléctrica sin fin, vecinos del
parcelamiento Arismendi, Socorro, Cinco de julio, La Esperanza, Libertador uno
y dos, Sabaneta, Barrio Tricolor, Concepción Palacios, Pomona, San José,
Claveles, Santa Rosalía y Buena vista cerraron la Circunvalación Uno, frente a
la subestación, para protestar debido a que ya suman más de 20 horas sin
servicio eléctrico, además de unos 60 electrodomésticos dañados.
Además de soportar las consecuencias
de un sistema eléctrico precario y deficiente, los marabinos tienen que
enfrentar también los peligros de salir
a la calle a protestar y exigir la atención de las autoridades.
Johana Gutiérrez, ama de casa, salió a protestar, pero fue reprimida por la
Mancomunidad Policial y efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana. “Salimos
a hacer presión porque no puede ser que nadie nos asiste, no ha venido nadie y Corpoelec lo que nos dice es que
tenemos que esperar. Ellos creen que los
trabajos se tardarán de 5 a 6 días y no podemos aguantar tanto. Aquí hay
niños, adultos mayores, gente hipertensa, con cáncer y la poquita comida que
tenemos ya se está dañando por el calor insoportable que hay. Esto es
horrible”, expresó.
Otras tres mujeres fueron agredidas por la GNB física y verbalmente durante
la manifestación. “Nos asustamos porque esa gente llegó disparando perdigones y
como les dijimos que no dispararan, nos agredieron. Nos golpearon y nos
gritaban cosas. Nos amenazaron que si volvíamos a protestar ya sabíamos lo que
iba a pasar, pero sabemos que si no lo
hacemos nos dejan sin luz para siempre porque aquí no hay dolientes.
Gracias a Dios no hay heridos”, dijo una de las agredidas, que prefirió el
anonimato.
“Aquí estamos peor, no
tenemos agua, desde anoche estamos sin
luz y tampoco tenemos gas, así no sobrevive nadie. En estas condiciones no
podemos vivir en paz. Pedimos auxilio porque nos están matando lentamente”,
dijo Wilfredo Nava, habitante del sector Sabaneta.
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