Entre uno y
dos años tienen los vecinos del sector Barrio Nuevo de Barquisimeto, estado Lara sin
pagar el servicio de electricidad por falta de taquillas de pago cerradas
por la propia Corpoelec.
La
precariedad de un servicio de primera necesidad como la electricidad llega a su
punto máximo cuando los usuarios no
tienen donde cumplir con el deber de cancelar por el suministro eléctrico
que reciben. Lo que a su vez, también libra a Corpoelec de cumplir cabalmente
con la función para la cual fue creada.
Las personas
abordadas en el oeste de Barquisimeto consideran que esta situación sería uno de las causas de los cortes de
luz que Corpoelec lleva a cabo no solo en esa zona, sino en todo el país.
Desde hace
algunos meses permanecen cerradas las
oficinas que Corpoelec mantiene en diferentes puntos de la ciudad para
pagar el servicio eléctrico, sin explicar por qué ni orientar a la población
sobre cómo puede cancelar su monto como suscriptor.
En 2017 la
estatal eléctrica ensayó un modelo de cobro que consistía en operativos con solo una persona
identificada con el uniforme de la empresa, un punto de venta inalámbrico y un
computador portátil. Sin embargo, estas jornadas eventuales no se volvieron a
realizar.
Los
barquisimetanos exigen a Corpoelec más organización
administrativa, y sobre todo responsabilidad
para cumplir con sus funciones, esto es, mantener en buen estado el sistema
eléctrico, responder en caso de apagones y averías, así como cobrar por el
servicio que prestan a la comunidad de manera contínua y eficiente.
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