“La crisis eléctrica está teniendo un impacto en la forma cómo la gente
se informa y el gobierno tiene una estrategia clara de desinformar, que la
gente no sepa lo que pasa, con apagones
que en ninguno hay respuesta oficial, sin decir qué está pasando”, sostuvo el
investigador y académico de
la Universidad Católica Andrés Bello, Andrés
Cañizález.
A juicio del experto, el racionamiento eléctrico, que a veces se
extiende hasta 24 horas, representa un tiempo “sin internet, sin información y
sin saber qué está ocurriendo”.
Para Cañizales, los extensos apagones que ha sufrido Venezuela y el
persistente esquema de racionamiento en varias regiones no se explica
únicamente por el descalabro del sistema
energético en el país, sino por un componente con acento político para
lograr mayor control social, restricción de libertades y aniquilación de todo
lo que pretenda sacarlos del poder.
Así, la fase oscura en la que nos
encontramos no sólo se originó tras una lamentable historia de clientelismo, corrupción, robo de recursos
del Estado, lavado de dinero, incapacidad, irresponsabilidad e indolencia,
sino que también, hallan en medio de este caos, una oportunidad para dominar y
callar los factores que les resulten adversos.
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